¿Por qué mi arte no busca la perfección?
- 4 jun
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Actualizado: 20 jun

Por mucho tiempo creí que para ser “buena” artista tenía que hacer obras impecables, simétricas, sin errores. Me tomó años entender que la perfección no solo era imposible, sino que bloqueaba lo más valioso: la autenticidad de mi alma al expresarse.
Hoy, cada trazo que dejo fluir en el papel no busca agradar, ni cumplir expectativas técnicas. Lo que busco es dejar hablar a mi espíritu, sin miedo, sin filtros. Porque en el arte, como en la vida, lo más puro es lo que nace sin forzar.
No hay error cuando hay verdad.
No hay error cuando lo que haces nace de un lugar seguro, íntimo y libre.
Eso es lo que intento transmitir: que pintar puede ser un acto de confianza, un ritual de liberación, una conversación sagrada entre tú y tu alma.
¿Y tú? ¿Qué parte de ti necesita hoy expresarse sin miedo al juicio?




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